jueves, noviembre 30, 2006

El ejercito custodia a Botnia…..

Hace un par de años un médico de izquierdas uruguayo cruzó el charco pidiendo ayuda para ganar las elecciones de su país. Este médico era legislador y criticaba un proyecto del payasesco presidente que tenía el “hermano” país (recordemos su incontinencia verbal delante de cámaras supuestamente apagadas y luego su grotesco y senil llanto cuando vino a pedirle disculpas al dormido De la Duda). Porque nosotros hemos tenido y tenemos presidentes impresentables pero nuestros hermanos no se quedan atrás… pero retomemos la historia. El oncólogo necesitaba de los votos de sus compatriotas en Argentina y para ello se les otorgó un asueto especial para que fuesen a votar allá. Pero, sabemos que hacer favores no sirve. En este mundo de hoy hay que ser hijo de puta. El precio que se paga por ayudar al matero es que termina enviando al ejercito a proteger a unos “incorruptibles” finlandeses que para no contaminar Finlandia contaminan el Cono Sur (hace unos días veía que de las 25 principales emisoras de CO2 de España había 6 o 7 pasteras como las que Botnia y Ence quieren instalar). La verdad resulta paradójico que la izquierda de Uruguay recurra al Ejército (el mismo que hizo desaparecer a muchos Tupamaros, que participó del Plan Cóndor, que hizo desaparecer a la nuera de Gelmán y que se mantiene en una abierta actitud corporativista) pero así son las cosas en este mundo. Los de izquierda son peores que los de derecha. Lo vimos con Lula, lo vemos con el payaso de Tabaré, que gran definición la de Discepolo en Cambalache….
Nadie dice que las pasteras no deben hacerse. Uruguay las necesita. Pero no a cualquier precio. Gualeguaychú (y la costa de Entre Ríos en general) trabajó duro durante años para convertirse en una alternativa turística en Argentina pero ¿quien irá al carnaval cuando comiencen los olores de las pasteras?. Nadie, ni el más fervoroso creyente de la industrialización (y yo soy uno de ellos) puede asegurar que no contaminarán porque se sabe que lo harán en mayor o menor medida. Pueden escribirse 100 informes a favor y 100 en contra pero sólo la buena voluntad de las partes hará que todo se solucione. Y gestos como el envío del Ejército no sirven.

domingo, noviembre 19, 2006

La violencia en el fútbol

Estaba viendo el resumen de la Liga española cuando me enteré que se suspendió Racing – San Lorenzo por que las hinchadas no dejaban salir a los micros. Hace mucho tiempo que nuestro fútbol viene en picada. No es el único con violencia, de hecho luego de comentar la noticia de Argentina en el mismo programa mostraron incidentes de ayer en un partido de la segunda de acá y mientras escribo esto estoy escuchando que hay incidentes en el clásico en Galicia que comenzará en una hora.
Sin embargo en Argentina la cosa viene de lejos. Viene de un Grondona que debe dejar la AFA, viene de dirigentes a los que dejan hacer cualquier cosa, de una policía corrupta que más que garantizar seguridad permite que sus agentes tenga una changa extra, de una justicia que, en general, no sirve (y ese es el mal más grave del país porque un mínimo de justicia debe haber, no soy ingenuo, sé que en todo el mundo hay una justicia para el que tiene y otra para el resto, pero en ciertas cosas es pareja para todos), con intermediarios que sólo quieren encontrar pendejos al mejor estilo Messí o Agüero que los llenen de oro y con jugadores que sólo quieren llenarse de oro. Y por supuesto hay vándalos. A los vándalos no hay que dejarlos entrar, está claro. ¿Pero quien les niega el ingreso?. ¿Los dirigentes que los usan?, ¿los policías con los que negocian?, ¿la justicia?, ¿los jugadores que les financian los viajes?. Por favor…. y en medio de todo estamos el grueso de los hinchas, que no podemos ver los partidos ni siquiera por televisión pero que fuimos, de a poco, dejando que nos fueran quitando el poco de ilusión que significaba ver, una vez por semana, al equipo de fútbol de nuestro amor. ¿Qué hicimos para prevenir esto?. Seguro que la gran mayoría dirá: ¿Qué puedo hacer yo?. Entre todos podíamos haberlo parado. Ahora es tarde, esperemos que podamos enderezarlo.

jueves, noviembre 16, 2006

No enojen al Papa!!!

Estaba leyendo en la contratapa de “El País” que el Papa está enojado porque hacen bromas con él y de su secretario.
Sinceramente, este Ratzinger es un personaje cómico. Si no, es imposible creer que es un Papa del siglo XXI, mejor tomarlo como una chanza del destino.
Un tipo que formó parte de la Juventudes Hitlerianas, que fue parte de la SS como bien se documentó antes de que lo eligieran Sumo Pontífice y que ahora parece que todos olvidaron, es para reírse.
Encima las bromas que le hicieron son mas que “light” porque si llegan a hacerle jodas en serio seguramente se comunica con su jefe y nos manda en diluvio universal versión II.
Realmente que gran falta de líderes que tenemos que Bush es presidente de Estados Unidos, este personaje representa a Dios en la Tierra, Putin maneja con mano férrea Rusia, en Japón reviven los nacionalistas, etc. Esperemos que el recambio nos funcione mejor……

miércoles, noviembre 15, 2006

Las claves y los sistemas…..

Estoy tratando de transferir dinero de una cuenta de un banco a otra en Argentina por Internet y, como hace unos meses que no lo hacía, no recuerdo la clave. Ya veo que deberé discutir un buen rato con algún pobre empleado de un call center (de esos “cerebro-less” que tanto se enojan cuando uno, harto de las pelotudeces que dicen, de las preguntas obvias que hacen y de su negativa a pasarle la comunicación a uno que sepa, les hace notar que son eso precisamente… unos “cerebro-less”)
[1] porque les cuesta entender que, a pesar de estar a 13.000 km de distancia, uno debe hacer operaciones bancarias o similares.
Pero el tema no viene por el lado de los call centres. Con los sueldos que se abonan no se pueden pedir premios Nobel de atención. Es lo que hay y en Argentina son bastante mejores que aquí. El problema viene de las benditas claves. Ya estoy harto de inventar claves. Que claves de más de 8 dígitos, los cuatro primeros si o si numéricos. Que clave que no se puede repetir, que una clave para ingresar a la web, una tarjeta de coordenadas para reforzar la seguridad y una clave para otras operaciones, que preguntas de seguridad cuando llamas al call center. Encima hay que renovarlas cada dos por tres, y no podes tener en archivo en la computadora porque un hacker te lo puede robar, no uses fechas conocidas porque un tipo piola puede robarte la agenda y sacar la clave, no la anotes en la agenda porque ídem. ¡¡¡¡¡BASTA!!!!!!
Yo soy un tipo imaginativo pero entre las claves del correo, del banco, de las tarjetas de crédito, de los sistemas del trabajo, de los Terminal Server, de los cajeros automáticos, de las alarmas, etc. ya me estoy quedando sin parientes a quienes robarles fechas, sin eventos con los que relacionar, sin frases divertidas que combinar las primeras letras…..
No sé puede más!!!!
Y encima, si vas a hacer los trámites personalmente, también tenes que poner clave!!!
Total… cuando un vivo quiere cagarte, te caga igual!!!. No hay sistema que el hombre haya inventado que otro hombre no le haya encontrado una debilidad y lo haya roto….
Entonces, ¿Por qué no volvemos a las cosas simples?. ¡Menos claves para un mundo mejor!
Saludos,


[1] El otro día con los médicos se enojó mi primo, ahora con los call center se enojará mi hermana… pero en el fondo ambos saben que tengo razón.

martes, noviembre 14, 2006

Impositivas

En los últimos días dos noticias atrajeron mi atención. Primero una de Italia y luego una de los vecinos del norte, o sea Francia.

Los italianos, no conformes con que los turistas paguen en Italia hoteles, viajes en tren, micro, buses, etc., compren chuchearías, revelen fotos, tiren monedas a la “Fontana de Trevi”, paguen entrada por visitar cuanto museo se les ocurra, vean en dos o tres lugares las mismas cosas y en todas perjuran que es la verdadera, paguen traductores, compren libros de arte, moda italiana, etc. ahora quieren cobrar entrada a las ciudades para bancar el mantenimiento. ¿No es que eso se paga con los impuestos que los turistas pagan directa e indirectamente en sus consumos?.

Por otra parte, los amigos franceses, tan amantes de la naturaleza, proponen que se les cobren impuestos extras a los países que no reduzcan las emisiones de CO2. Si bien no lo dicen directamente, la patada va dirigida en principio a China, India y en menor medida a Brasil. Una vez que ellos se cansaron de emitir y contaminar ahora quieren cobrar impuestos. No está mal comenzar a encajar a esos países, pero gran parte de las plantas que contaminan en China, India, Brasil, Argentina, etc. son de multinacionales con origen en esos países que al instalarse fuera de sus entornos naturales utilizan tecnología perimida en su tierra o simplemente suprimen controles que les resultan onerosos. Una elegante manera de proteccionismo….

La creatividad recaudadora no tiene límites……

domingo, noviembre 12, 2006

La mentira de la seguridad jurídica

Estoy leyendo una nota de “El Periódico” en la que el gobernador del estado de Bahía (Brasil) se presenta a supuestos inversores catalanes en el Barcelona Meeting Point (una reunión multitudinaria de inversores, gestores, bancos, constructoras, etc. del sector de la construcción español que se está llevando a cabo estos días en la Fira de Barcelona). Allí, el señor Jacques Wagner (¡que nombre más brasileño!) dice que viene a dar un mensaje de estabilidad y seguridad jurídica.
Hace rato que le tengo ganas a este tema de la seguridad jurídica. Me parece la pelotudez más grande que dicen los empresarios y sus asesores cuando no tienen deseos de hacer negocios en un país. En vez de decir, señores no pongo plata acá “perque non me piace” te salen con la boludez de la seguridad jurídica. ¿Es seguro invertir en China?. ¿Quién lo garantiza? ¿Mao?. Los tribunales chinos, ¿son fiables?, ¿son independientes? Por favor…. a mentirle a otro. La gran mayoría de los occidentales que están invirtiendo allí no son capaces de entender ni medio de chino.
¿Es seguro invertir en Rusia, en Nigeria, en el Golfo Pérsico?. Sin embargo hay gente que pone plata allí y gana mucho.
La seguridad jurídica no existe ni existirá (salvo quizás en Suiza y sólo hasta que tenga una crisis que la haga reveer). La libra esterlina era intocable sólo hasta el final de la Seguna Guerra, el patrón oro del dólar era absoluto hasta que a los árabes se les ocurrió aumentar el precio del petróleo, los bancos japoneses eran seguros hasta que palmó el primero, Argentina era el alumno perfecto del FMI hasta que se llevó todas las materias a marzo (pero de dos años después). ¡Basta de pelotudear con la seguridad jurídica!. ¿No se dieron cuenta que depende de los políticos y economistas?. ¿Hay algo menos seguro que ellos?.

viernes, noviembre 10, 2006

Tiempo pasado

Hoy leí indirectamente, a través de un mail que mi suegra le envió a Inés, una presentación de alguien que añoraba los años de su infancia, comparándolos probablemente con la de sus hijos y dando a entender, como nos quisieron hacer entender nuestros padres, y a ellos los suyos, y así generación tras generación que todo tiempo pasado fue mejor.

Hay cosas que son ciertas, pero como uno tiende a recordar lo bueno y bonito y a olvidar lo malo siempre compara un vaso medio lleno con uno completo y en este último hay de todo, bueno y malo.

Yo no reniego de mi infancia, la verdad he sido un tipo afortunado. Hijo, nieto y sobrino cuasi único hasta los seis años, con una educación que (aunque perfectible) no fue mala, con unos padres que se desvivieron por darme lo mejor, por unos abuelos que me malcriaron como corresponde, con amigos, con barrio, con potrero, con bicicleta, con los libros de Verne y Salgari, con las buenas películas en la tele (las de Pepe Arias con la abuela tomando café y comiendo chocolate las tardes de invierno eran impagables) en fin con las cosas lindas que uno tiene que tener en esa edad (después de todo es la edad que uno tiene que disfrutar ¿no?).

También hubo cosas feas, como en todas las infancias, muertes de familiares cercanos, los problemas típicos de vivir en un país como la Argentina en los setenta y ochenta, etc. pero el balance es bueno.

Pero también creo que mis hijos, en su medida, han tenido una infancia buena. Distinta a la mía, sin tanta calle, mas encerrados, pero no mala. Mis hijos se ríen cuando me ganan un partido en la Play (en realidad se ríen cuando hago un gol, o sea cada muerte de obispo), son usuarios de PC desde que nacieron (y a estas alturas yo, que he sido un amante de la tecnología toda mi vida, tengo que empezar a preguntarles como hacer determinadas cosas), no conocieron la tele en blanco y negro, ni los teléfonos de Entel, ni los Montoneros, ni a Isabelita, ni a Videla (eso si, se perdieron la agradable sensación de gritarle hijo de puta a 50 metros de distancia en pleno 1978, que locura!!) pero no la pasaron mal (y eso que los hice sacrificar cruzando el charco y dejando sus cosas para empezar de nuevo acá).

Cada época es distinta, con sus pro y contras, pero yo creo que lo mejor es lo que vendrá. Lo que construiremos nosotros, lo que le dejaremos a mis nietos y bisnietos…. Eso si que va a ser bueno!!!

jueves, noviembre 09, 2006

Embole

Una de las cosas que más me molestan es el continuo discutir sobre los mismos temas.
Parece que el ser humano, o por desgracia algunos con los que me toca convivir, viven siempre discutiendo las mismas cuestiones y nunca las saldan.
Se habla de un tema, se intercambian puntos de vista, se aprecian las distintas opiniones de quienes pueden estar fuera pero desean ser oídos, parece que se cierra el asunto y se vuelve a empezar….
Ciertamente es desgastante y tengo la impresión que se trata de gente que desea parecer abierta al cambio pero que en el fondo el cambio le importa tres pepinos, que lo que quieren es que el otro rinda su bandera y hacer lo que ellos quieran.
Para mi no es grave, salvo que uno de esos sea uno de quienes están por encima mío en la línea de mando, porque me gusta la discusión y cuando sostengo algo lo hago convencido pero realmente agota.

miércoles, noviembre 08, 2006

Libros que dejan marca

Cuando estaba completando la información que piden para abrir el blog me preguntaban sobre mis películas, música y libros favoritos. Fui completando uno a uno esos campos y cuando me tocó completar el libro me acordé de un pequeño libro que leí en 1982 y que fue una de esas cosas que marcaron mi vida profesional. Quizás nadie haya oído hablar de él (y si lo hicieron fue porque puede haberme escuchado contar la anécdota). El libro en cuestión es “Gente Trabajando” de Pehr G. Gyllenhammar. El autor del libro fue presidente de Volvo y en este libro cuenta como se reformularon las viejas líneas de montaje del fordismo para adaptarlas a las nuevas formas de trabajo moderno, implementando el trabajo en equipo, la responsabilidad de los componentes del mismo, etc. Su manera de contar las cosas, la preocupación porque los obreros tuviesen mejores condiciones de trabajo, etc. hicieron que me empezasen a gustar los temas relacionados con la organización de empresas y todo lo que le sigue. Una de las buenas recomendaciones de Daniel “El Chiva” Hernández.
¿Para que sirven los turnos?

Empecemos por aclarar, no me refiero a los turnos de los telos, porque esos si tengo en claro para que sirven. Mi duda se refiere a los turnos de los médicos, los oftalmólogos, los odontólogos, etc.
Llevo años haciéndome esa pregunta en las salas de espera. Durante mucho tiempo pensé que era un fenómeno netamente argentino, que te dieran un turno para una hora y te atendiesen 20, 30 ó 40 minutos después (y de manera proporcional a si llegaste 10 minutos antes, en punto o 10 minutos tarde, ya que la ley de Murphy de los turnos indica que cuando llegues con más adelanto a tú turno más prolongada será tú espera) pero he descubierto que la sanidad catalana también tiene esa manía (y por lo oído y leído no solo pasa en España y Argentina sino también en otros lares).
Cuando uno va a un médico a su consultorio particular y, pese a tener turno para la hora en que llegó, ingresa a la sala de espera y se encuentra con 20 personas sabe que deberá armarse de paciencia. Pero lo mismo pasa cuando uno va a un centro médico donde atienden 50 profesionales y en la sala de espera, ¡no hay nadie!. Sentate y espera que con suerte en este siglo te atendemos, y si no, paciencia en el próximo ¡seguro!.
¿Hay algún placer inconsciente de estos profesionales en tener a la gente esperando?. ¿Tendrá que ver con esperas que han sufrido para rendir exámenes?. Nunca ninguno me lo supo explicar… lo que si es verdad es que no les gusta que uno les recrimine que su tiempo es tan valioso como el de ellos….
Espero que mis amigos médicos no se sientan ofendidos por mi impertinencia y continúen saludándome como hasta ahora pero si les sirve puedo darles un consejo. ¡Aprendan de los psicólogos!. Jajajajaja
Besos y abrazos
Varias veces en los últimos tiempos, y más desde que estoy acá en Barna, medité sobre crear un blog. Hoy lo estoy poniendo en marcha siguiendo los pasos de mi hijo Kike que comenzó uno con un amigo de Argentina.

A pesar de ser un tipo eminentemente tecnológico y de ser un apasionado de la web y de los gadgets electrónicos, la idea del blog la medité bastante. Puede que sea algo pasajero, que me dure unos días y se me pase o que sea algo que perdure en el tiempo (al menos una semana….jajajaja).

Soy asiduo lector de blogs de los temas que son de mi interés y sentía que ponerme a escribir uno podía ser una falta de respeto para quienes lo leyeran pero también creo que, en un mundo donde cada día hay más opresión por parte de las clases dirigentes (no importa si son de derecha o izquierda), los blogs son uno de los pocos canales que tenemos los mortales para expresarnos con libertad (aunque nos registren luego…).

Veremos que temas van saliendo pero como soy un observador curioso de este mundo que nos toca vivir creo que siempre habrá algo que comentar.

Una abraçada